Apropiaciones | 2021
40 páginas
20x13
Fairey, mejor conocido como Obey, es un artista urbano de fama global y autor del único ensayo de divulgación dedicado a analizar la historia, las estrategias y los principios productivos del arte con calcomanías. Disponible por primera vez en español.
Del texto: "El arte con calcomanías no solo se trata de lo que hay en ellas, sino también de cómo se integran al entorno. La ubicación más común son postes y cruces peatonales a la altura de los ojos. Estos también son los lugares que más rápido se limpian. Subir un par de metros anula a los trabajadores de la ciudad y a los ciudadanos justicieros. Las calcos un poco más grandes son ideales para estos lugares altos. La necesidad es la madre de la invención, ¿no es cierto? Me cansé tanto de que despegaran mis calcos que me puse a investigar qué tipo de vinilo usaba el gobierno para las calcos de verificación vehicular que se pegan en las matrículas. El material se llama “vinilo destructible” y se descascara en pedazos diminutos cuando intentas despegarlo. Cuesta aproximadamente el doble, pero vale la pena para algunas ciudades más limpias. [...] En Nueva York, los cerrajeros colocan pequeñas calcos de información de contacto en todas las puertas. El graffitero Espo hizo algunas propias que son invisibles para el público pero destacan para los otros graffiteros. Yo mismo hice unas cuantas calcos subvirtiendo los típicos carteles de “Usted está siendo vigilado”. Parecen tan oficiales que, por lo general nadie las toca, incluso cuando están en lugares visibles. También hice calcomanías falsas del Departamento de Pesas y Medidas de California como las que se encuentran en todos los surtidores de nafta. Solo las cambian una vez al año. Las posibilidades con la pegada de calcomanía son infinitas".
Apropiaciones | 2021
40 páginas
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Fairey, mejor conocido como Obey, es un artista urbano de fama global y autor del único ensayo de divulgación dedicado a analizar la historia, las estrategias y los principios productivos del arte con calcomanías. Disponible por primera vez en español.
Del texto: "El arte con calcomanías no solo se trata de lo que hay en ellas, sino también de cómo se integran al entorno. La ubicación más común son postes y cruces peatonales a la altura de los ojos. Estos también son los lugares que más rápido se limpian. Subir un par de metros anula a los trabajadores de la ciudad y a los ciudadanos justicieros. Las calcos un poco más grandes son ideales para estos lugares altos. La necesidad es la madre de la invención, ¿no es cierto? Me cansé tanto de que despegaran mis calcos que me puse a investigar qué tipo de vinilo usaba el gobierno para las calcos de verificación vehicular que se pegan en las matrículas. El material se llama “vinilo destructible” y se descascara en pedazos diminutos cuando intentas despegarlo. Cuesta aproximadamente el doble, pero vale la pena para algunas ciudades más limpias. [...] En Nueva York, los cerrajeros colocan pequeñas calcos de información de contacto en todas las puertas. El graffitero Espo hizo algunas propias que son invisibles para el público pero destacan para los otros graffiteros. Yo mismo hice unas cuantas calcos subvirtiendo los típicos carteles de “Usted está siendo vigilado”. Parecen tan oficiales que, por lo general nadie las toca, incluso cuando están en lugares visibles. También hice calcomanías falsas del Departamento de Pesas y Medidas de California como las que se encuentran en todos los surtidores de nafta. Solo las cambian una vez al año. Las posibilidades con la pegada de calcomanía son infinitas".
